Al final, la urgencia se convirtió en una cazadora sin compasión de las buenas oportunidades.
Categoría: Incontinencia verbal
Máquinas destructoras
Siempre queremos con desesperación lo que no tenemos. Y cuando lo conseguimos… nos convertimos automáticamente en una máquina destructora de deseos cumplidos.
El mismo camino
Lo paradójico de todo este relato es que el camino a cualquier destino siempre es el mismo.
El orgullo
No tiene sentido camuflarlo en palabras más bellas: el orgullo es una mierda.
Nada se pierde, ¿todo se transforma?
Julio Cortázar escribió una vez: «todo hay que volver a inventarlo, el amor no tiene por qué ser la excepción». De hecho, el amor que muta sin convertirse en ceniza puede ser un faro esencial en el camino.
Definitivamente, tal vez
Las historias que no dejamos ser por miedo, deben ser las más dolorosas y las más difíciles de olvidar.
Demasiadas pocas certezas
Nos creímos la fake new del tiempo y su inmortalidad. Nada puede ser mejor que lo que está sucediendo en este instante porque mañana aún no existe, porque mañana tal vez no llegue.
Hasta que cayó la ficha
Casi siempre tenemos la respuesta que buscamos frente a nuestros ojos. Simplemente es más fácil ignorarla porque la verdad suele tener un sabor amargo hasta que caen la ficha, el velo y la ilusión y no queda más que aceptar.
Cada pequeña muerte
Lo cierto es que prefiero sentir algo, aunque sea dolor, a que pase la vida pasivamente sin penas ni glorias y que no queden historias por contar.
La vida hace lo que quiere
Alguien tiró esa frase lapidaria para despertar un puñado de memorias que no intentan contradecirla pero sí adherir que con las cartas que nos tocan cada quien intenta hacer su mejor movimiento y su mejor juego para poner la partida a nuestro favor.