Alguien tiró esa frase lapidaria para despertar un puñado de memorias que no intentan contradecirla pero sí adherir que con las cartas que nos tocan cada quien intenta hacer su mejor movimiento y su mejor juego para poner la partida a nuestro favor.
Alguien tiró esa frase lapidaria para despertar un puñado de memorias que no intentan contradecirla pero sí adherir que con las cartas que nos tocan cada quien intenta hacer su mejor movimiento y su mejor juego para poner la partida a nuestro favor.