Hasta que cayó la ficha

Me confundí.

Al principio,
pecaba de ignorante o de ilusa.

Hasta que me cayó la ficha.

No fue la temporada de eclipses,
tampoco Mercurio retrogradando.
Ni siquiera podría fanfarronear de una epifanía.

Tenía la respuesta que buscaba en las narices,
me lo estabas diciendo con todas las letras,
con todas las comas y cada punto y aparte.

Pero yo prefería seguir en mi burbuja de corazones,
en ese mundo de cartón en donde tengo la posibilidad
de peliculear la trama que se me cante a partir de un clic.

Vos insistías con el círculo verde.
Esa maldita circunferencia que rodeaba de vez en cuando tus stories
me estaba gritando lo que no quería aceptar.

Hasta que entendí.

No éramos más que mejores amigxs.
Amigxs.

Y nada más.

Deja un comentario